Cuando preguntamos a un niño o niña cuál es el aparato de la casa que más le gusta, ¿qué nos responden casi siempre? LA TELEVISIÓN. Pero cabe preguntarse cuál es el uso que se le da y qué contenidos son los más adecuados para que vean los niños. Este blog quiere ser un foro de reflexión sobre un tema que preocupa a padres y educadores.

domingo, 22 de marzo de 2009

¿Cómo protegemos a los niños de los contenidos de la televisión?

Estas imágenes corres-ponden a dos de las publica-ciones que ha realizado el Consejo Audiovisual de Navarra (CoAN). Éste podría ser un enlace de interés sobre este tema, ya que el Consejo Audiovisual de Navarra ha realizado estudios y propuestas sobre el menor y la 'pantalla', incluyendo en esta última a televisión, ordenadores videojuegos y móviles: http://www.consejoaudiovisualdenavarra.es/menor/familia.htm
Gran parte del tiempo que los niños pasan frente al televisor lo hacen acompañados de adultos.
Es cierto (y hablo ahora como madre) que en ocasiones nos resulta mucho más cómodo tener a los niños quietos y entretenidos con algún programa de la tarde pero, pese al tan cacareado horario protegido,no son de contenido adecuado para que lo vean nuestros hijos. Los padres deberíamos tener una serie de recursos alternativos a la televisión. Cuando éramos pequeños salíamos a la calle a jugar, nos juntábamos con otros vecinos..., hoy en día esto ha cambiado totalmente. Cuando los niños y niñas tienen una edad adecuada, sí se pueden plantear como alternativas el deporte, la música, danza, etc... pero mientras son pequeños la tele tiene un imán para ellos... ¿Cómo verla entonces?
En primer lugar, controlando cierto tipo de imágenes. Pero es algo sumamente difícil de conseguir. Hay contenidos que perturban muchísimo a los niños/as: escenas de violencia con gente llorando, diálogos llenos de palabras malsonantes, por ejemplo, hacen mella en ellos. Para este control por parte de los padres es necesario conocer un poco el tipo de programación que existe en la franja horaria, para limitar los contenidos que vamos a permitirles.
En segundo lugar, a lo mejor parece una tontería, pero para mi caso particular ha resultado todo un gran invento: el dispositivo de bloqueo infantil en el televisor. Con el mando a distancia bien a desmano para los niños, no pueden cambiar el programa que hemos elegido para ellos. Así sabemos (casi siempre) lo que ven. Desde luego con mis hijos es más un instrumento disuasorio, ya que al de un rato se aburren y se van a jugar juntos a otro lado.
La situación ideal cuando un niño o niña esté viendo la televisión es que un adulto esté lo suficientemente cerca para saber en todo momento qué es lo que visiona y también para que el niño pueda preguntar o comentar sobre lo que está viendo. Es muy importante hacerle distinguir entre ficción y realidad, aunque ya sabemos que es costoso. Pero merece la pena.

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